El pasado live en TikTok, tuve el honor de moderar una de las conversaciones más intensas y necesarias que hemos tenido hasta el momento. Bajo el título “Puerto Rico ¿Estado 51?”, nos reunimos puertorriqueños de distintas partes del mundo, ciudadanos de otras nacionalidades, veteranos, profesionales, y voces apasionadas por un tema que nos toca el alma: el estatus político de Puerto Rico y su posible admisión como el estado número 51 de los Estados Unidos.
💬 Lo que se dijo (y no se dijo)
Durante más de cuatro horas, exploramos profundamente temas históricos, sociales, económicos y estratégicos que giran en torno a la estadidad para Puerto Rico. La conversación se dio de manera espontánea, con momentos de respeto, otros de alta tensión, y algunos incluso de confrontación directa.
Entre los principales puntos discutidos se destacan:
El costo de la relación actual: Se mencionó que Puerto Rico recibe alrededor de $1.1 mil millones anuales del gobierno federal, pero devuelve entre $4 y $7 mil millones a través del comercio, impuestos y otros mecanismos económicos.
La Ley de Cabotaje: Un tema que siempre genera debate. Se aclaró cómo esta ley limita la economía de la isla al exigir que toda importación y exportación se haga mediante barcos de bandera estadounidense, encareciendo así el costo de vida.
Participación olímpica y cultural: Hubo quienes expresaron temor de perder la representación de Puerto Rico en competencias como Miss Universo o las Olimpiadas. Otros recordaron que ya existe un Comité Olímpico Puertorriqueño independiente y que estos espacios podrían mantenerse.
Presencia militar y estratégica: Se discutió el valor geopolítico de Puerto Rico para EE. UU., especialmente en contextos militares. Se mencionó la existencia de bases estratégicas, recursos naturales, farmacéuticas y la destacada participación de soldados puertorriqueños en el ejército de EE.UU.
Los plebiscitos: Se subrayó que en cinco votaciones populares ha ganado la estadidad, aunque aún no se ha hecho un plebiscito vinculante avalado por el Congreso de EE.UU. El último, en 2020, mostró un 52.5% a favor.
Impacto económico y tributario: Se aclaró que muchos de los impuestos federales ya se pagan (como el Seguro Social y Medicare), pero que con la estadidad habría una integración completa a las leyes fiscales federales. También se mencionó que ya existe una constitución local aprobada por el Congreso desde 1952, lo que simplificaría la transición.
Conflictos y tensiones: Hubo roces culturales entre participantes mexicanos y puertorriqueños, especialmente por estereotipos y diferencias laborales. A pesar de las tensiones, hubo momentos valiosos de reconciliación y entendimiento mutuo.
Veteranos y servicio militar: Muchos de los presentes, incluyendo participantes veteranos de guerra, hablaron con orgullo y emoción sobre el servicio militar puertorriqueño y los sacrificios hechos desde generaciones pasadas.
🎯 Conclusión
Este live no fue perfecto —ninguno lo es— pero sí fue real, crudo y absolutamente necesario. Lo que quedó claro es que Puerto Rico no es una carga, es una pieza estratégica, cultural y humana en el rompecabezas de los Estados Unidos. Y lo que muchos reclamamos, con voz firme y argumentos en mano, es el derecho a ser reconocidos como lo que ya somos: ciudadanos americanos plenos, no de segunda clase.
La lucha por la estadidad sigue, y aunque las probabilidades históricamente han sido complejas, el momento político actual y el despertar de muchos puertorriqueños dentro y fuera de la isla lo convierten en una conversación inevitable.
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